Análisis datos Paro registrado y EPA

Análisis y valoración EPA 4T16

Enero 2017

SORPRESA POR LA EVOLUCIÓN EN LA OCUPACIÓN DEL SECTOR EDUCATIVO, QUE PROVOCA QUE LA RALENTIZACIÓN DEL RITMO DE CREACIÓN DE EMPLEO LLEGUE ANTES DE LO PREVISTO

El mercado laboral urge a una reforma de las políticas activas y a una mayor participación del sector privado del empleo

  • Los datos de la EPA del 4T16 nos sorprenden con una ralentización en el ritmo de creación de empleo, que llega antes de lo esperado. El comportamiento de la afiliación del sector educativo no se ha visto reflejado en los datos extraídos del cuestionario.
  • Con este, son ya 4 años consecutivos de descenso del desempleo, que se sitúa ya en niveles de 2009, con una tasa de paro del 18,63% (casi 2,3 puntos menos que en 2015).
  • 2016 cerró con 508.100 ocupados y con 4.237.800 parados.
  • El descenso de la población activa ha sido muy acusado. Ha caído en 102.400 personas respecto al 3T16 hasta situarse en los 22.745.900 efectivos.
  • El perfil de la persona que se desanima en el último año a la búsqueda de empleo es de un varón de 30 a 34 años.
  • Agricultura e Industria crean empleo y Construcción y Servicios lo destruyen.
  • Ha disminuido el número de parados que llevan más de un año en el desempleo (-2,2%) y también lo ha hecho el total de hogares con todos sus miembros activos en el paro (-50.500 hogares).
  • La EPA pone de manifiesto la necesidad de flexibilizar el mercado laboral (más si consideramos la alta tasa de paro estructural -18%-), dotándolo de los mecanismos adecuados, algo que pasa por una reforma profunda de las políticas activas de empleo.
  • Una mayor participación de la gestión de las ETT en el mercado laboral, crea empleo (de mayor calidad que el empleo temporal directo), reduce el desempleo y aumenta la empleabilidad de los trabajadores, a lo largo de toda su vida laboral.

 

Los datos que hemos conocido hoy de la EPA del 4T16, reafirman la tenencia positiva del mercado laboral en los últimos años, pero nos sorprenden con una ralentización en el ritmo de creación de empleo, que llega antes de lo esperado. Con este, son ya 4 años consecutivos de descenso del desempleo, que se sitúa ya en niveles de 2009, con una tasa de paro del 18,63% (casi 2,3 puntos menos que en 2015).

Este descenso en el número de parados, aunque ha sido menor que en 2015, ha supuesto que 413.900 personas hayan encontrado un empleo en 2016. De esta forma, 2016 cerró con 18.508.100 ocupados y con 4.237.800 parados, su cifra más baja desde el tercer trimestre de 2009.

El dato menos positivo de la EPA de cierre de 2016, ha sido el acusado descenso de la población activa, que ha caído en 102.400 personas respecto al 3T16 hasta situarse en los 22.745.900 efectivos. Esto supone un 0,56% menos respecto al mismo trimestre del año anterior. Este descenso interanual se debe en un 65,7% al colectivo masculino que disminuye su cifra en 84.000 efectivos y en un 34,3% al femenino (43.800); y se enfatiza en el colectivo de 30 a 34 años, que caen a una tasa del 5,6%.

El perfil de la persona que se desanima en el último año a la búsqueda de empleo es de un varón de 30 a 34 años.

Respecto al número de ocupados, ha descendido, en el último trimestre del año, en 19.400 (-0,1%). Del mismo modo, de manera interanual se han creado 413.900 empleos. En concreto la evolución del empleo ha crecido a un ritmo del 2,29% de manera interanual. Se ha reducido también, el total de los hogares españoles que tiene a todos sus miembros activos en paro, respecto al trimestre precedente (-50.500), situando el agregado por debajo de los 1,3 millones (1.387.700).

Por sectores, Agricultura e Industria crean empleo y Construcción y Servicios lo destruyen. En concreto, Agricultura crea 72,9 mil empleos (9,8%) e Industria crea 47,8 mil empleos (1,9%). Por el contrario, Construcción destruye 27,9 mil empleos (-2,5%) este trimestre y Servicios destruye 112,3 mil empleos (-0,8%).

Nos parece reseñable la gran reducción en el número de ocupados que ha sufrido el sector educativo. Una evolución de la ocupación que no se corresponde con la dinámica del mercado laboral en este sector, en términos de afiliación, que acostumbra a mantenerse bastante estable durante el año escolar.

Los parados que llevan más de un año buscando empleo suponen un 56,4% sobre el total de parados. Este colectivo disminuye su cifra respecto al trimestre pasado (-2,2%; -54,4 mil).

Si comparamos la evolución de los sectores público y privado, el sector público destruye empleo asalariado respecto al trimestre precedente, en concreto 17,8 mil empleos. Esto se debe en un 66,9% a la destrucción de empleo asalariado indefinido, que destruye en este trimestre 11,9 mil empleos y en un 33,1% al empleo asalariado temporal (-5,9 mil empleos; -0,9%). El sector público cuenta con un total de 2,986.100 asalariados. El sector privado, por su parte, mantiene el número de asalariados en el cuarto trimestre de 2016. Esto se debe únicamente a que la destrucción de empleo temporal (-73 mil empleos) se compensa con la creación de empleo indefinido (+72,2 mil).

La tasa de temporalidad del sector privado disminuye en 0,5 p.p. (27,4%) en este trimestre y la del sector público disminuye en 0,1 p.p. (22,8%).

La tasa de temporalidad global se sitúa, por tanto, en el 26,4%.

En conclusiones de ASEMPLEO, la tasa de paro ha disminuido menos de lo que se esperaba. En concreto, se ha reducido en 28 centésimas en este trimestre, situándose en el 18,63%, algo que adelanta la ralentización del ritmo de creación de empleo, que estaba prevista para los primeros meses de 2017.

De esto modo, la EPA pone de manifiesto la necesidad de flexibilizar el mercado laboral, dotándolo de los mecanismos adecuados, algo que pasa por una reforma profunda de las políticas activas de empleo. Esta exigencia del mercado, tiene carácter de urgencia y más, si cruzamos los datos que hemos conocido hoy, con la altísima tasa de paro estructural que tiene nuestro país y que se sitúa en el entorno del 18%.

La población activa no tiene la formación adecuada a las demandas empresariales y el desajuste existente es cada vez mayor debido al cambio del modelo productivo, que tiende, cada vez más, a la economía digital. Esto exige una diagnosis ocupacional, una orientación y una formación previa, y realizada teniendo en cuenta las necesidades de las empresas en cada momento. El Estado debe poner a trabajar a todos los recursos con los que cuenta para solucionar el problema del desempleo, que es la principal preocupación de 3 de 4 españoles.

En este sentido, las Agencias de Empleo y Empresas de Trabajo Temporal, estamos dispuestos a ofrecer nuestra experiencia y a colaborar con el servicio público, en la inserción de parados. Está comprobado y tenemos el ejemplo en nuestros vecinos europeos, que una mayor participación de la gestión de las ETT en el mercado laboral, crea empleo (de mayor calidad que el empleo temporal directo), reduce el desempleo y aumenta la empleabilidad de los trabajadores, a lo largo de toda su vida laboral.

Ver informe en PDF