Valoración ASEMPLEO_Paro Registrado y Afiliación

Los registros laborales del mes de abril presentan un crecimiento del empleo de 238.436 personas junto a una bajada del paro de 73.890. En abril, la afiliación a la Seguridad Social se ha incrementado en 542.048 personas respecto a abril del año pasado, lo que se traduce en una mejora de la tasa interanual de evolución de la afiliación, alcanzando el +3% desde el +2,7% del mes anterior.

En términos generales estamos ante un buen mes de abril para el empleo, que arroja datos mejores a los observados en abril de 2019 (+186.785), lo que parece indicar que el tejido empresarial está anticipando una buena campaña de verano, tal y como estaba previsto. Cabe destacar que abril es un buen mes del año para el mercado de trabajo, y el buen comportamiento de este mes ha permitido cerrar con una nueva cifra récord de ocupados de 20.614.988.

Se mantiene la tendencia de descenso en el número de afiliados con contrato temporal y aumento en el de afiliados con contrato indefinido, de modo que la tasa de temporalidad en la afiliación se ha reducido ligeramente por debajo del 13,8%, mínimo de la serie histórica.

Todos los sectores dentro del Régimen General, excepto educación, se comportan según la estacionalidad propia del mes y crean empleo. Destaca, como es habitual en abril, el sector de Hostelería (+123.940 afiliados) motivado por la Semana Santa.

Tras la Hostelería, el comercio al por mayor y al por menor arrojan el segundo mejor dato (+20.350 efectivos), seguido por las actividades administrativas y servicios auxiliares (+12.824 afiliados).

Si atendemos a la serie desestacionalizada, el empleo ha crecido en el mes de abril 128.824 personas, lo que se traduce en un 0,6% de variación mensual. Industria y Construcción presentan un incremento del empleo desestacionalizado del 0,3% (+7.101 y +4.828 afiliados más respectivamente), mientras que Agricultura crece un 0,3% (+4.372) y Servicios un 0,7% (+110.396 afiliados desestacionalizados).

Por su parte, el paro registrado se reduce en 73.890 personas respecto a marzo, hasta los 2,78 millones, lo que permite situar la tasa de evolución interanual del paro en negativo (-8%). Esta es la primera vez que la cifra de desempleo está por debajo de los 2,8 millones desde 2008. El buen comportamiento del mercado de trabajo está teniendo su reflejo en el nivel de desempleo, que se reduce por segundo mes consecutivo este año.

Por sexo, tanto hombres como mujeres presentan una caída similar en su cifra de desempleados, siendo ligeramente superior (en variación porcentual) en el colectivo masculino (-3,1%; -35.134) que el de las mujeres (-2,3%; -38.756).

Por su parte, los menores de 25 años reducen en un 9,2% su cifra de parados, dejando el agregado en 195.251 personas, cifra récord desde que se tienen referencias.

En abril se registraron 1.157.316 contratos, lo que supone una disminución del 20,2% respecto a abril de 2022 (+292.777 contratos). Los contratos temporales, que representan el 54,16% del total de contratos creados, han disminuido un 16,59% interanual y un 10,39% mensual. Por su parte, los contratos indefinidos han disminuido un 24,06%interanual y muestran también un descenso del 13,83% respecto del mes de marzo. Si se comparan estos volúmenes de contratación con los de toda la serie histórica, este mes de abril se convierte tras febrero de este año, en el mes que menos contratos se han realizado.

Si se analiza la contratación indefinida por tipo de jornada, el 35% de toda la contratación indefinida es fija discontinua, mientras que a tiempo completo representa un 42%.

Comentario de Andreu Cruañas, presidente de ASEMPLEO:

“Los datos de Paro registrado y Afiliación de Abril reflejan que estamos ante unos buenos datos de empleo, como suele suceder habitualmente en este mes, que recibe el impulso de la Semana Santa animada por el turismo interior, e incluye la contratación previa al puente del 1º de Mayo y que anticipan una buena campaña de verano y confirman la tendencia positiva de la economía española.

El comportamiento del balance entre la contratación temporal e indefinida, incluyendo los contratos fijos discontinuos, refuerza la realidad de que la actividad económica, muy dependiente del sector servicios, muestra una necesidad de flexibilidad que se ajuste al dinamismo de los sectores que pueden actuar positivamente sobre el mercado de trabajo.

Es importante destacar que pese a los buenos síntomas que está mostrando el mercado de trabajo seguimos en cifras muy alejadas a las que presentan los demás socios europeos, como es el caso del paro juvenil, que presenta, a pesar de su mejora, la tasa más elevada de la Unión Europea, con un 29,5%, lo que apunta claramente a la necesidad de mayores elementos de flexibilidad para trabajadores y empresarios, que faciliten el acceso al mercado de trabajo de los colectivos prioritarios, si queremos ver los indicadores de empleo competiendo con las demás economías europeas y eliminar los déficits estructurales, entre los que hay que incluir el paro de larga duración y el reingreso al mercado de trabajo de las personas mayores de 52 años.”

 

Valoración ASEMPLEO_Paro Registrado y Afiliación

Los datos conocidos esta misma mañana de Paro Registrado y Afiliación dan continuidad a la estela de incertidumbre que rodea a la sostenibilidad de nuestro mercado de trabajo en el corto y medio plazo. El desempleo vuelve a subir atraído como un imán a la barrera de los tres millones de parados de la que parece, estamos condenados a no alejarnos. Por su parte, la afiliación cae con mucha más intensidad que en el mismo periodo del año pasado y el crecimiento del empleo desestacionalizado pierde fuerza respecto a la serie histórica.

Posiblemente la resiliencia de la que ha hecho su fuerza en la última etapa del año 2022 ha sido un mero espejismo estadístico y, como ya avisábamos muchos expertos, nuestro mercado de trabajo llevaba mandando señales de alerta desde hace mucho tiempo.

El continuo desgaste de nuestra gran bolsa de desempleo, el enquistamiento de los problemas endémicos de los que ya hemos venido avisando desde hace muchos meses, las continuas señales de que el mercado de trabajo necesita una solución estratégica de país y  la inamovible posición de nuestro país como líder en desempleo en Europa deben hacer tomar decisiones inmediatas en este sentido.

No podemos mirar hacia otro lado y esconder los desequilibrios de nuestro mercado de trabajo bajo la premisa de la reducción de la temporalidad en un alto porcentaje. Seguimos cometiendo los mismos errores que en el pasado asumiendo que la flexibilidad y las necesidades temporales de las empresas no existen y que son un problema.

Debemos de utilizar todos los recursos disponibles de los que dispone nuestro sistema para satisfacer las necesidades reales de las empresas y hacerlo encajar con una fuerza laboral que puede y quiere trabajar. Debemos abrir nuevas pasarelas al empleo a una gran bolsa de personas con las condiciones suficientes de calidad, seguridad y empleabilidad que les permitan permanecer en la rueda del empleo de forma estable.

La modalidad de un contrato no dota de mayor seguridad a un trabajador. El seguimiento individualizado de las personas, las correctas píldoras formativas que complementen y mejoren la empleabilidad y la detección de necesidades de empresas acorde con perfiles idóneos son algunos de los grandes retos que demos de mejorar para dotar de calidad real a los trabajadores y a los empleos.

Valoración ASEMPLEO. Encuesta de Población Activa IV Trimestre 2022

Los datos de la EPA del cuarto trimestre de 2022 confirman la teoría de que el empleo en el sector privado está empezando a mostrar claros síntomas de debilitamiento desde el inicio de la reforma laboral. Hay que tener en cuenta que los crecimientos anuales del empleo en este sector alcanzaron cuotas del 6% en el segundo trimestre de este año y ahora, apenas superan el 2,5%. Muestra de ello es que en el cuarto trimestre del año el sector privado destruye empleo respecto al periodo anterior. Por tanto, el mercado de trabajo muestra claras señales de estancamiento y de perdida de la capacidad de resiliencia que había mostrado hasta ahora.

Prueba de este estancamiento es la serie desestacionalizada. El empleo no consigue sumar ocupados en un cuarto trimestre que no había dejado de hacerlo por debajo del 1% de media en los últimos años en el mismo periodo.

Las empresas y empresarios reclaman insistentemente mayor flexibilidad y condiciones necesarias y óptimas para crear empleo sostenible y de calidad.

No podemos dejar caer de nuevo al mercado de trabajo, teniendo en cuenta la delicada situación de nuestro entorno y la gran incertidumbre que afecta a las economías globales. Debemos aprender de lo ocurrido en pasadas crisis y fortalecer los cimientos que tanto nos ha costado levantar y afianzar en nuestro mercado de trabajo.

La tasa de paro, por su parte, vuelve a crecer acercándose, de nuevo, a la barrera del 13%. Desde el segundo trimestre de este año no ha parado de crecer pese a la introducción de la reforma de laboral. El desempleo en este país ha sido el gran olvidado a la hora de implementar planes y estrategias dirigidas a corregir desequilibrios del mercado de trabajo. El enquistamiento socio-laboral del desempleo es cada vez más evidente. El número de desempleados vuelve a superar los 3 millones de parados y el paro de larga duración vuelve a crecer, alcanzando la cifra de 1.282.000 desempleados con más de un año en el desempleo.

Desde ASEMPLEO, venimos reclamando desde hace tiempo que España necesita una estrategia de país para acometer los problemas reales de las empresas para crear nuevas oportunidades laborales y reducir de una forma contundente, los indicadores de desempleo que nos sitúan desde hace años, en lo más alto de la lista de países europeos.

Mayo retorna al mercado de trabajo a su patrón estacional precovid

Los registros laborales del mes de mayo se comportan algo mejor de lo esperado. En mayo, la afiliación a la Seguridad Social se ha incrementado en 212.000 personas respecto a marzo (+180.000 previstos), lo que se traduce en una mejora de la tasa interanual de evolución de la afiliación, alcanzando el +3,83% desde el +3,23% del mes anterior.

Datos esperanzadores para dar impulso a la recuperación una vez se levante el estado de alarma

Los registros laborales del mes de abril se comportan algo peor de lo previsto. En abril, la afiliación a la Seguridad Social se ha incrementado en 134.000 personas respecto a marzo (+160.000 previstos), lo que se traduce en una mejora de la tasa interanual de evolución de la afiliación, alcanzando el +3,23% desde el -0,45% del mes anterior. La comparativa interanual queda distorsionada por el efecto base negativo que provocó la pandemia de la Covid-19 el año pasado en el mes de abril.

La primavera no comienza con la suficiente fuerza como para poder ser optimistas de cara al comportamiento general del empleo en 2021

Los registros laborales del mes de marzo se comportan mejor de lo previsto. En marzo, la afiliación a la Seguridad Social se ha incrementado en 71.000 personas respecto a febrero, lo que se traduce en una mejora de la tasa interanual de evolución de la afiliación. Por su parte, el paro registrado se reduce en 59.000 personas respecto a febrero, hasta alcanzar los 3,95 millones, llevando la tasa de evolución interanual del paro hasta el+11,31% desde el +23,49% del mes anterior.

Datos malos que confirman la mala situación de buena parte de nuestro tejido empresarial

El mes de febrero se comporta según lo esperado. La afiliación a la Seguridad Social suma casi 21.000 efectivos más respecto al mes anterior, lo que confirma que este mes de febrero ha sido bastante peor que en años anteriores: la variación mensual de la afiliación de este año ha sido 1/4 parte de lo que fue el año pasado.

El mes de enero muestra una importante reducción del empleo fruto del alto componente estacional de dicho mes

Los registros laborales del mes de enero se comportan en línea con lo previsto. En enero, la afiliación a la Seguridad Social se ha reducido en 219.000 personas respecto a diciembre (- 200.000 previstos), lo que se traduce en una mejora de la tasa interanual de evolución de la afiliación, alcanzando el -1,75% desde el -1,86% del mes anterior. En un mes de enero estacionalmente malo para el empleo (debido al final de la campaña de Navidad), este enero de 2021 ha traído consigo ,además, la explosión de la tercera ola del Covid-19 en nuestro país, que ha provocado el endurecimiento de las restricciones a la actividad hostelera y comercial en la práctica totalidad del país.

El mercado de trabajo sigue su senda de recuperación, enmascarada, en parte por la figura de los ERTES

La EPA 4T20 arroja un aumento de la ocupación de 167.400 personas respecto al trimestre anterior, en línea con lo anticipado por ASEMPLEO (+179.000 efectivos). Este incremento de la ocupación se traduce en un repunte de la tasa interanual de crecimiento del empleo, pasando del -3,51% en el 3T20 al -3,12% en el 4T20. De esta forma, el año 2020 termina con 576.000 ocupados menos en media respecto a 2019.

El año 2020 cierra con una pérdida de 360.000 afiliados menos y con 724.532 parados más

Los registros laborales de afiliación del mes de diciembre están en línea con lo previsto. En diciembre, la afiliación a la Seguridad Social ha aumentado en 26.432 personas respecto al mes de noviembre (+25.000 previstos), lo que se traduce en una ligera mejora de la tasa interanual de evolución de la afiliación, que alcanza el –1,86% desde el -1,83% del mes anterior.

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